Conocer a Dios
Conocer a Dios – El Objetivo Supremo"Conocer a Dios es de crucial importancia para vivir nuestras vidas. El mundo se convierte en un lugar extraño, loco, y doloroso y vivir en él llega a ser algo decepcionante y desagradable, para aquellos que no conocen a Dios" (Jim Packer).
Conocer a Dios – El Principio de la Sabiduría
A través de las Escrituras Judías aprendemos que conocer a Dios empieza con el temer a Dios. Ciertamente, "el temor de Dios es el principio de la comprensión, de la sabiduría, y del conocimiento" (Proverbios 1:7, Proverbios 9:10, Salmo 19:9, Salmo 33:8, Salmo 111:10, y Eclesiastés 12:13).
"El hecho de que Dios mora dentro de nosotros no debe anular la verdad de que está por encima de nosotros, infinitamente exaltado por encima de toda la creación. Pensar en Dios como un ser trascendente, inspira adoración y culto. Sin esta idea en nuestras mentes, la adoración es un mero ritual y formalidad. En otros tiempos, los hombres y mujeres que sabían lo que era andar en el temor del Señor tenían como base para sus vidas un concepto de Dios como de "elevado y sublime." Por íntima que fuera su comunión con Dios, estaban controlados por el hecho de que Dios era un ser elevado y sublime. ¿Por qué será que en la Iglesia de hoy en día no encontramos muchas personas de esta índole"? (Selwyn Hughes).
"La Iglesia ha renunciado al elevado concepto que alguna vez tuvo de Dios y lo ha sustituido por uno tan bajo, tan innoble, hasta llegar a ser completamente indigno de hombres pensantes, que lo adoran. Ha hecho esto, no deliberadamente, sino poco a poco y sin darse cuenta, y su misma inconsciencia sólo hace más trágica su situación" (A.W. Tozer).
- Más tú, Jehová, para siempre eres Altísimo (Salmos 92:8).
Conocer a Dios – Buscándolo de Todo Corazón
Conocer a Dios tiene que ver con el buscar a Dios. De hecho, Dios nos dice en las Escrituras: "Y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón." (Jeremías 29:13)
- Dios, Dios mío eres tú; de madrugada te buscaré; mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra seca y árida donde no hay aguas (Salmo 63:1).
Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan. Y digan siempre los que aman tu salvación: "¡Engrandecido sea Dios!" (Salmo 70:4).
- Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado (Juan 17:3).
Conocer a Dios – Se Trata de Amor
Comprender el increíble amor de Dios por nosotros es el paso más importante para conocer verdaderamente a Dios. ¡Es el amor de Dios lo que tiene el poder de quitar el temor y hacernos libres!
- Digan ahora los que temen a Jehová: "Que para siempre es su misericordia" (Salmo 118:4).
- Se complace Jehová en los que le temen, y en los que esperan en su misericordia (Salmo 147:11).
¡Aprenda Más!
Y tú, ¿qué piensas?
Todos hemos pecado y merecemos el juicio de Dios. Dios, el Padre, envió a Su único Hijo para cumplir ese juicio por aquellos que creen en Él. Jesús, el creador y eterno Hijo de Dios, quien vivió una vida sin pecado, nos ama tanto que murió por nuestros pecados, tomando el castigo que merecíamos, fue sepultado, y se levantó de la muerte como lo dice la Biblia. Si de verdad crees y confías de corazón en esto, recibe a Jesús como tu Salvador, declarando: «Jesús es Señor», serás salvado del juicio y podrás pasar la eternidad con Dios en el cielo.
Sí, hoy he decidido seguir a Jesús
Ya soy seguidor de Jesús
Sigo teniendo preguntas
