Los Josés de la Biblia
Los Josés de la Biblia – El José del Antiguo TestamentoUno de los Los Josés de la Biblia fue demasiado seguro de sí mismo, joven hijo de Jacob. Sus hermanos mayores sabían que era el favorito de su padre. Por esta razón, sus 10 hermanos mayores conspiraron contra el muchacho y lo vendieron a mercaderes de esclavos, pero le dijeron a su padre que el muchacho había sido despedazado por un animal. José había tenido sueños acerca del plan de Dios para su vida; así que con confianza y fortaleza, soportó esta historia asombrosa en Génesis.
Los mercaderes de esclavos lo llevaron a Egipto y lo vendieron a Potifar, uno de los oficiales de Faraón. José sirvió bien a su amo y ganó gran favor. Pero la esposa de su amo trató de seducir a José, un joven de integridad impecable. Después que él la rechazó, ella fue a su esposo con acusaciones falsas. Esto condujo a que José fuera puesto en prisión. Una vez más, Dios proveyó Su presencia y protección para José. El carcelero se hizo amigo de él y se enteró de la habilidad divina de José para interpretar sueños.
Por ganar esta reputación, José fue llamado a interpretar un sueño que preocupaba profundamente a Faraón. Ninguno de los sabios de Faraón había sido capaz de descifrar el sueño. Pero José relató acertadamente los símbolos en el sueño para un tiempo futuro de abundancia seguido de uno de gran hambruna. El Faraón recompensó a José otorgándole la administración de las tierras de Egipto. En esos tiempos prósperos, él almacenó las cosechas abundantes, para los trágicos tiempos venideros. Durante los años de hambruna, los hermanos de José vinieron en busca de grano y comida para impedir que sus familias muriesen de hambre. Sin reconocer a este prominente egipcio como a su hermano hebreo más joven, él les ordenó que regresaran con el hermano menor. Cuando los hermanos regresaron con Benjamín, José reveló su identidad. Los hermanos sufrieron gran remordimiento por sus acciones, y José los perdonó. Fue una reunión feliz entre un acongojado padre y su hijo perdido. Los años de constante confianza en Dios trajeron no sólo reunión, sino su alta posición, de manera que fue capaz de salvar a una nación de la muerte.
Los Josés de la Biblia – El José del Nuevo TestamentoJosé, mejor conocido como el esposo de María y padre terrenal de Jesús, se encuentra en los libros de Mateo y Lucas del Nuevo Testamento. José fue un hombre de creencias firmes. Él no solo se esforzó en hacer lo que era correcto, sino que también lo hizo de la manera correcta. Cuando su prometida María vino a él con la noticia de su embarazo, él supo que el niño no podía ser suyo.
José decidió romper el compromiso, pero determinó hacerlo de tal manera que no avergonzaría a María. Él quiso ser justo, actuando con imparcialidad y amor. Él tenía un gran respeto por el carácter de María, pero era difícil creer su historia de haber sido embarazada milagrosamente por el Espíritu Santo de Dios. Durante este tiempo de reflexión fue visitado por un mensajero de Dios, confirmando la historia de María y convenciendo a José de que María no había sido infiel. Dios instruyó a José que se casara con la joven y honrara su virginidad hasta que el bebé naciera. José obedeció al Señor.
Inicialmente, debe haber sido muy difícil para José el conciliar esto en su mente natural. Pero José tuvo que ser un hombre íntegro, muy espiritual y fiel. Se desconoce cuánto tiempo estuvo José en la vida de Jesús, pero él comprendió, desde el momento de la visita celestial, que Jesús iba a ser muy especial. La última vez que José es mencionado en la Biblia fue cuando Jesús tenía doce años. Podemos suponer que siendo el hombre honorable que era, José cumplió el papel de padre terrenal lo mejor que pudo, con todo el amor que un hombre podría tener por su hijo. A José se le dio, y cumplió, el papel de protector, proveedor, y maestro, criando al muchacho sin ninguna reserva. Dios le proporcionó a José seguridad, fortaleza, y las habilidades de liderazgo para criar al niño que habría de ser el Salvador.
Los Josés de la Biblia – Lecciones de los dos JosésAl leer las historias de los dos hombres encontramos que fueron hombres de mucha integridad. Ambos fueron probados por eventos de la vida que hubieran podido dejarlos amargados o enojados. En cambio, ellos tuvieron relaciones íntimas con Dios, en las que permanecieron constantes, a pesar de las adversidades y tribulaciones inmerecidas que fueron forzados a soportar. Ambos Josés fueron hombres de gran fe y abiertos a escuchar en su espíritu lo que Dios tenía planeado para ellos y sus vidas futuras. Dios probó a través de ellos que la posición social no tiene mucha importancia para Él, trayendo a los dos desde situaciones precarias a roles de gran importancia y ejemplo.
Dios honra la integridad, la obediencia, y la fidelidad. Nuestra obediencia a Él traerá una mayor guía y bendiciones de Él. Con la ayuda de Dios, cualquier situación o apariencia de las cosas que han salido mal puede ser usada para un buen desenlace, cuando permanecemos firmes y tenemos una
relación personal con Dios. Si usted lo busca y escucha Sus instrucciones, Él le contestará a usted también con provisiones para un desenlace bendecido.
¡Aprenda Más! Y tú, ¿qué piensas?
Todos hemos
pecado y merecemos el juicio de Dios.
Dios, el Padre, envió a Su único Hijo para cumplir ese juicio por aquellos que creen en Él.
Jesús, el creador y eterno Hijo de Dios, quien vivió una vida sin pecado, nos ama tanto que
murió por nuestros pecados, tomando el castigo que merecíamos,
fue sepultado, y
se levantó de la muerte como lo dice
la Biblia. Si de verdad crees y confías de corazón en esto, recibe a Jesús como tu Salvador, declarando: «
Jesús es Señor», serás salvado del
juicio y podrás pasar la eternidad con Dios en el cielo.
¿Cuál es tu respuesta?
Sí, hoy he decidido seguir a Jesús
Ya soy seguidor de Jesús
Sigo teniendo preguntas