Camino de los Romanos a la Salvación

Camino de los Romanos a la Salvación: Una Carta de Buenas Nuevas
El Camino de los Romanos a la Salvación, resume las buenas nuevas de Jesucristo. Es una colección de los versículos de la carta de Pablo a los romanos, que presentan claramente los fundamentos y las bases de la Fe Cristiana.

Camino de los Romanos a la Salvación: Una Perspectiva Original
El Camino de los Romanos a la Salvación puede ser presentado de muchas maneras. Nos encontramos con esta carta fenomenalmente profunda y penetrante de un estudiante de último año de secundaria, que fue impresa en su anuario escolar. En parte, él examina su corazón y su propósito al seguir adelante en la vida. Él también usa la escritura de Romanos para afianzar su mensaje.

¿A qué pedirás ayuda, sino se la pides a aquel que es más fuerte que tú mismo? (C.S. Lewis).

“La asombrosa realidad es que hay una persona perfecta que es más fuerte que tú mismo, y esa persona es Dios. Es Jesucristo. Y en este punto me contradigo a mí mismo, porque yo soy un hombre egoísta y Dios me ama. Yo tristemente me inclino hacia mí mismo, hacia el pecado, y aun así, él me admira cuando intento ser como él… generoso. ‘Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros’ (Romanos 5:8).

No existe un requisito para su admiración, para su amor eterno; porque él sabe que en nosotros no existe la capacidad ni la naturaleza para lograrlo, para hacer lo correcto. ‘No hay un solo justo, ni siquiera uno’ (Romanos 3:10). ‘Pues todos han pecado y están privados de la gloria de Dios’ (Romanos 3:23).

Nuestra naturaleza codiciosa es a primera vista, engañosamente aceptable, es probable que incluso razonable, pero en verdad, es avara y destructiva, se preocupa por sí misma, hasta que se encuentra ante Dios, encorvada por la deshonestidad, cubierta de faltas imperdonables, a la luz de su gloriosa perfección. ‘Porque la paga del pecado es muerte’ (Romanos 6:23a).

Ustedes dirán: ‘¡Cuán cruel y poco benevolente es este Dios, condenándonos sin una salida, maldiciéndonos al nacer!’ Ese no es el caso, porque hay un camino. ‘Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna’ (Juan 3:16). ‘Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie llega al Padre sino por mí’ (Juan 14.6)”.

Camino de los Romanos a la Salvación: El Sendero es Muy Claro
El Camino de los Romanos a la Salvación está claramente presentado en la Biblia. Cree en Jesús como aquel que cargó tus pecados, murió en tu lugar, fue enterrado, y a quien Dios lo resucitó. La sangre de Cristo y la resurrección es lo que nos asegura la vida eterna cuando lo invocamos como nuestro Señor y Salvador. “Porque todo el que invoque el nombre del Señor será salvo” (Romanos 10:13). “Todo el que” incluye a todos y cada uno de nosotros.

Por lo tanto, si tú entiendes que eres un pecador y crees que Jesucristo vino como el único Redentor del pecado, entonces entiendes el Camino de los Romanos a la Salvación. La pregunta es: ¿Estás listo para implementar el plan, recibiendo el regalo de Dios, Jesucristo? Si es así, cree en Jesucristo, arrepiéntete de tus pecados y entrégale el resto de tu vida a él como tu Señor:

“Padre, sé que he quebrantado tus leyes y que mis pecados me han separado de ti. Estoy sinceramente arrepentido y ahora quiero apartarme de mi pasado pecaminoso y dirigirme hacia ti. Por favor, perdóname y ayúdame a no pecar de nuevo. Creo que tu hijo Jesucristo murió por mis pecados, resucitó de la muerte, está vivo y escucha mi oración. Invito a Jesús a que se convierta en el Señor de mi vida, a que gobierne y reine en mi corazón de este día en adelante. Por favor, envía tu Espíritu Santo para que me ayude a obedecerte y a hacer tu voluntad por el resto de mi vida. En el nombre de Jesús oro, amén.”

“Arrepiéntanse y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados --les contestó Pedro--, y recibirán el don del Espíritu Santo” (Hechos 2:38).

Si decidiste convertirte en cristiano el día de hoy, bienvenido a la familia de Dios. Ahora, como una forma de crecer más cerca de él, la Biblia nos dice que sigamos adelante con nuestro compromiso

• Bautízate como lo ordenó Cristo.
• Dile a otra persona de tu nueva fe en Cristo.
• Pasa tiempo con Dios cada día. No tiene que ser un largo periodo de tiempo. Simplemente desarrolla el hábito diario de orar y leer su Palabra. Pídele a Dios que incremente tu fe y tu comprensión de la Biblia.
• Busca estar en comunión con otros cristianos. Sé parte de un grupo de amigos Cristianos que responda tus inquietudes y te apoye.
• Encuentra una iglesia local en la que puedas adorar a Dios.

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