Dar Gloria a Dios
Dar Gloria a Dios – Nada OcultoEl deseo de darle gloria a Dios va más allá de la alabanza y de la adoración. Decirle la verdad a Dios expresa Su gloria. Acán, de la tribu de Judá, violó una prohibición sagrada al robar oro, plata, y ropa fina. Se involucró junto con su casa en la destrucción de Jericó. "Entonces Josué dijo a Acán: 'Hijo mío, da gloria a Jehová el Dios de Israel, diciendo la verdad. Y declárame ahora lo que has hecho. No me lo encubras'" (Josué 7:19).
Para darle gloria a Dios:
- Reconozca Su omnisciencia (lo sabe todo) esto es, Él es justo.
- Arrepiéntase y haga una franca confesión delante de Él.
- Presente un relato veraz y completo–-sin ocultar nada.
Cuando Jesús sanó a un hombre ciego de nacimiento, los Fariseos trataron de desacreditar a Jesús al mismo tiempo que parecían honrar a Dios. "Entonces volvieron a llamar al hombre que había sido ciego, y le dijeron: 'Da gloria a Dios (diciendo la verdad); nosotros sabemos que ese hombre es pecador'" (Juan 9:24). Esperando arruinar el testimonio del hombre, los judíos lo acosaron. El hombre que hasta ahora había sido mendigo escogió un camino seguro, su propia experiencia. La franca confesión de este hombre proporcionó el peso de la simple verdad que la respaldaba, dándole gloria a Dios.
Dar Gloria a Dios – Bendito o MalditoAl ocultar la verdad dejamos de darle gloria a Dios, provocando Su ira. El profeta Jeremías instó al pueblo de Dios a arrepentirse y a confesar su orgullo. ¡"Escuchad y oíd! No os envanezcáis, pues Jehová ha hablado.
Dad gloria a Jehová Dios vuestro, antes de que sea demasiado tarde. . .” (Jeremías 13:15-17). Ofrecerle a Dios nuestras "sobras" en adoración, profana el nombre del Señor. Como un levita fiel, Malaquías, nota el engaño de los sacerdotes, así como de los laicos, al ofrecer sacrificios corruptos, esto es, sacrificios mancillados (Malaquías 1:13-14). Una vez más, Dios demandó la verdad. Si no oyereis, y si no decidís de corazón dar gloria a Mi nombre', ha dicho Jehová de los ejércitos, 'enviaré maldición sobre vosotros, y maldeciré vuestras bendiciones. . .'” (Malaquías 2:2 RV). En Apocalipsis, el evangelio de la verdad eterna debe ser proclamado por toda la creación–-para dar gloria a Dios. En el cielo, un ángel se le aparece al apóstol Juan: "'Temed a Dios,' dijo a gran voz, y
'dadle gloria. . .'” (Apocalipsis14:6-7). Las bases mismas del Anticristo en el mundo se sacudieron al caer el juicio de Dios sobre los que rechazaron la verdad. Los que negaron la gloria y el poder de Dios blasfemaron con mentiras. "Ellos maldijeron el nombre de Dios. . . Y no se arrepintieron para
darle gloria" (Apocalipsis 16:8-9).
Dar Gloria a Dios – La BellezaAquellos que deciden darle gloria a Dios, encuentran razones para celebrar diariamente. En nuestra adoración, ponemos a un lado nuestra naturaleza carnal para dedicarnos a Dios. A medida que adoramos al Señor de los cielos y la tierra, experimentamos la belleza de Su santidad (1ra de Crónicas 16:25-29). Las razones para darle gloria a Dios nunca se agotan.
En el Salmo 96, toda la tierra debe darle gloria a Dios. Cuando Cristo completó Su obra en la tierra, entró a Su gloria en el cielo. Vestido con un manto de majestad y coronado con gloria, la belleza de la santidad es personificada en Jesucristo (Salmo 96:4-9). El salmista, David, parece estar convocando a los ángeles para darle gloria a Dios también, adorándolo en la belleza de Su santidad. Hasta en los truenos y las tormentas resuena la gloria de Dios (Salmo 29:1-3).
Al adorar en verdadera santidad es revelada la verdadera belleza de Dios Mismo. Es la belleza de los ángeles que le dan gloria en el reino de los cielos; es la belleza de los santos, compartiendo de la naturaleza divina de Dios.
¡Aprenda Más! Y tú, ¿qué piensas?
Todos hemos
pecado y merecemos el juicio de Dios.
Dios, el Padre, envió a Su único Hijo para cumplir ese juicio por aquellos que creen en Él.
Jesús, el creador y eterno Hijo de Dios, quien vivió una vida sin pecado, nos ama tanto que
murió por nuestros pecados, tomando el castigo que merecíamos,
fue sepultado, y
se levantó de la muerte como lo dice
la Biblia. Si de verdad crees y confías de corazón en esto, recibe a Jesús como tu Salvador, declarando: «
Jesús es Señor», serás salvado del
juicio y podrás pasar la eternidad con Dios en el cielo.
¿Cuál es tu respuesta?
Sí, hoy he decidido seguir a Jesús
Ya soy seguidor de Jesús
Sigo teniendo preguntas